“No tengas nada en tu casa que no sepas que es útil o que no consideres bello” (William Morris, a finales del siglo XIX).
Las Arts & Crafts (literalmente Artes & Oficios) surgieron no solo como un movimiento estético, paralelo al modernismo, sino como una reivindicación de la dignidad del ser humano frente a la alienación de la revolución industrial.
El movimiento Arts and Crafts nació en la Inglaterra victoriana y estuvo muy marcado por la personalidad de su principal impulsor: William Morris, arquitecto, diseñador, escritor, poeta, artista multidisciplinar y activista político. Esta última faceta es la que diferencia sus postulados de cualquier otro movimiento.
Estéticamente estaba cercano a lo que Gaudí o Puig i Cadafalch tramaban en el mismo momento, también en la valoración del artesano y en su ecologismo incipiente. Pero mientras éstos asumían que su trabajo solo estaba al alcance de privilegiados (el park Güell por ejemplo), el componente político y social de Morris era determinante: el Arte debía estar al alcance de todos y no solo de una élite.
Ello también le diferencia del art déco: en el foco de Morris están las clases populares que alimentan la revolución industrial.
Y rompió otro axioma: para ellas confeccionó elementos de una belleza delicadísima, el Arte para combatir la desesperanza y los sombríos dolores existenciales. Eso sí fue una revolución: arte libre y para todos.
Nadie lo ha explicado mejor que Jaume Plensa: “Siempre me impresionó que Pau Casals, un hombre muy comprometido políticamente, creía que había que llevar la cultura al mundo obrero pero no iba allí y hacía una instalación con llaves inglesas y monos de trabajo, sino que iba allí y hacía un concierto de Bach. Es mucho más radical y transformador, mucho más políticamente importante, insistir en la belleza”.
Morris escribió: “No quiero arte para unos pocos, de la misma manera que no quiero educación para unos pocos o libertad para unos pocos”.
William Morris llevó sus postulados a la práctica: creó una empresa en forma de cooperativa, conocida después como Morris & Co, y su extraordinaria personalidad le rodeó de artistas/artesanos o arquitectos/diseñadores, sin desmerecer unos con otros. Muebles, vidrieras, tapices, azulejos, papeles pintados, joyas, cerámica, metalistería, encuadernaciones, pintura, dibujo, grabado… son las piezas que surgieron de aquel movimiento, siempre hechas a mano. Tal vez alguno de Ustedes recuerde la Exposición que el MNAC organizó a principios de 2018.
Por ello les escribía al principio que si bien se suele circunscribir el movimiento Arts & Crafts como la reacción a la revolución industrial, no olvidemos que ahora las redes sociales nos ponen en contacto con el artista/artesano directamente en su taller. Las Arts & Crafts nos han dejado una herencia para siempre: la relación entre el trabajo y la vida, la honestidad de los materiales y la belleza de los objetos cotidianos.
arts and crafts